sábado, 23 de julio de 2011

Sábado, madrugada.

He bebido, sí.

Todo va bien, puede que sea ese el motivo por el que no actualizo, de todas formas, si todo va, bueno, "bien", me parece de mal gusto quejarme, aunque este sea mi blog y escriba lo que me da la gana.

Pero eso, me parece de mal gusto.

Hoy sólo estoy enfadado conmigo, y Ana tiene razón.

Buenas noches.

viernes, 8 de julio de 2011

Viernes, madrugada.

Tenía pensado escribir el martes, pero no quería escribir tres "Martes, madrugada"

Es raro, está todo bien. Todos los veranos me pasa igual, siempre empiezo con buen pie.
Después se acaba echando a perder de alguna u otra forma, pero para eso ya está el otoño, para olvidar y empezar un duro invierno lleno de altas espectativas de las cuales no se cumplen ni la mitad... pero bueno, de ilusiones se vive, y de los errores se aprende.
Espero no tener que aprender nada de esto, a decir verdad tengo ganas de que esto continúe así. Justo así, quiero que siga así, no estoy seguro de si quiero que avance. Esto de las relaciones nunca ha sido lo mío, por eso prefiero apostar por lo seguro y dejar que todo continúe bien.

Y bueno, mientras pasa el verano sigo aquí, en este horno llamado Sevilla. Espero que pronto me lleguen las vacaciones a mí. Creo que es eso lo que me fastidia del verano, no tener a mi grupo de amigos al completo aquí. Bueno, eso y este calor que no para de hacerme sudar. Me gusta ducharme, pero hasta yo, que soy un maniático de la higiene personal considero que cuatro duchas al día es un gasto de tiempo y dinero enorme. Pero es eso o vivir bajo una costra de sudor asquerosa y cuanto menos sexy...

Entre mis planes de este verano está ir a Jaén, a ver a mis amigos de ahí. Si se tercia, ir a Málaga a ver a mi hermana, y a mi querida Barcelona con mis amigos.
Echo de menos a mi nana, va a ser el primer verano que esté sin ella, pero la vida sigue, y he de acostumbrarme a estas cosas. Soy el hijo más joven de mi familia, debo acostumbrarme a que mis familiares se vayan antes de lo que me gustaría, me ha tocado así, y no me queda más remedio que resignarme y aceptarlo como me viene.

Tengo curiosidad por saber cómo acabará este verano, cada año acaba de una manera distinta... es lo bueno -o malo- de mi, que nunca se pueden hacer suposiciones sobre mi situación más allá de dos semanas en adelante.

Lo dicho, todo va bien, pienso mucho, demasiado, pero bueno, soy yo, qué se le va a hacer.